An Luna
Schwester von dem ersten Licht,
Bild der Zärtlichkeit und Trauer!
Nebel schwimmt mit Silberschauer
Um dein reizendes Gesicht;
Deines leisen Fußes Lauf
Weckt aus tagverschloßnen Höhlen
Traurig abgeschiedne Seelen,
Mich und nächtge Vögel auf.

Forschend übersieht dein Blick
Eine großgemeßne Weite.
Hebe mich an deine Seite!
Gib der Schwärmerei dies Glück,
Und in wollustvoller Ruh
Säh der weitverschlagne Ritter
Durch das gläserne Gegitter
Seines Mädchens Nächten zu.

Des Beschauens holdes Glück
Mildert solcher Ferne Qualen,
Und ich sammle deine Strahlen
Und ich schärfe meinen Blick;
Hell und heller wird es schon
Um die unverhüllten Glieder,
Und nun zieht sie mich hernieder,
Wie dich einst Endymion.
Al la luna
¡Oh tú, la hermana de la luz primera,
símbolo del amor en la tristeza!
Ciñe tu rostro encantador la bruma,
orlada de argentados resplandores;
Tu sigiloso paso de los antros
durante el día cerrados cual sepulcros,
a los tristes fantasmas despabila,
y a mí también y a las nocturnas aves.

Tu mirada domina escrutadora
y señorea el dilatado espacio.
¡Oh, elévame hasta ti, ponme a tu vera!
No niegues a mi ensueño esta ventura;
y en plácido reposo el caballero
pueda ver a hurtadillas de su amada,
las noches tras los vidrios enrejados.


Del contemplar la dicha incomparable,
de la distancia los tormentos calma,
yo tus rayos de luz concentro, ¡oh luna!,
y mi mirada aguzo, escrutadora;
poco a poco voy viendo los contornos
del bello cuerpo libre de tapujos,
y hacia él me inclino, tierno y anhelante,
cual tú hacia el de Endimión en otro tiempo.